martes, 13 de mayo de 2008

El chaleco

El chaleco es el tercer pétalo del trebol.

Tan imprescindible como el kayak y la pala.

En la bici el casco y en el kayak el chaleco.

No consideres no llevarlo porque no es una opción.

Chaleco. Sí. Siempre.

De nuevo, el metodo Manuel Luque: busca, compara, etc.

A mí, personalmente me gustan los que reúnen la flotabilidad entre el ombligo y los pezones, por delante y por detrás. Más abajo topan con el cubrebañeras. Mas arriba estorban y dan demasiado calor en verano.

La talla segun tu peso. Todos llevan la tabla peso - talla en la pared interior trasera.

El chaleco es una ayuda a la flotabilidad. En caso de baño, te permite concentrarte en el rescate despreocupandote del concepto "flotar".

No sirve si pierdes el conocimiento. Para eso existen los chalecos tipo "sillon orejero" que mantienen la cabeza boca arriba y fuera del agua bajo cualquier circunstancia. Pero sería difícil encontrar uno de esos con el que fuera comodo palear.

Es interesante que lleve algún bolsillo. Hay enciclopedias enteras ya que hablan de lo que hay que llevar en el chaleco. Ten en cuenta que si tienes tan mala suerte de acabar flotando a la deriva, lo que lleves en el chaleco será todo lo que tengas para sobrevivir y llamar la atención de cualquier medio de rescate que salga a buscarte.
Yo, hoy por hoy, una barrita, un pito (que venía con el chaleco) y la cámara de fotos.
Cuestionable. Lo sé. Pero mi recorrido habitual es una hora y media de paleo y, normalmente, alrededor del cuartel general. Ya hablaremos cuando empiece a hacer travesías realmente retadoras o salir por territorios inexplorados e inhóspitos. Mi autonomía vital no llega hasta ahí hoy.
Como con el resto del equipo, endulzar con agua dulce después de navegar decuplica la vida del chaleco y sus cremalleras.
Chaleco sí. De tu talla. Cómodo. No es una opción.

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